Aula de Pociones

Allí estaba primer día de clases, estaba muy nerviosa, había planeado mucho esa primera impresión hacia mis estudiantes de primer año, no quería parecer la típica profesora amargada de pociones, pero bueno, todavía les tenía una sorpresa, cuando salieran de mi clase y se dirigieran a la próxima. Pero ya verían por ellos mismos. Vi que comenzaron a entrar, mientras decían buenos días, vi como se sentó en una de las primeras mesas la Jefa de Slytherin, que comenzó a sacar sus utencilios, entraban de todas las casas estudiantes, y cuando todos estaban acomodados, me erguí, parándome delante de todos, con mi falda estrecha y mi blusa de mangas largas, mi cabello suelto hacia un lado, tomé mi varita en la mano, miré a todos esos chicos y dije:

- Muy buenos días, yo soy Bely Malfoy, soy su profesora de pociones este curso, espero que nos entendamos y nos llevemos bien. Ahora, deberán formar grupos de cuatro. Uno de cada casa. Por ejemplo en esta primera mesa ya hay una Slytherin, venga a sentarse un Gryffindor, un Ravenclaw y un Hupplepuff. Para comenzar con nuestra clase.

Todos me obedecieron sin protestar, aunque vi en el rostro de algunos el disgusto de no sentarse con sus amigos, pero es que tal y como yo lo veía era mejor que todos se llevasen bien, y que juntos hicieran nuevos amigos. Ya acomodados todos una vez más, y ya más seguramente expresé:

- Saquen sus pergaminos, deberán tomar nota a lo siguiente.

Sacaron sus pergaminos y plumas y cuando vi que todos estaban listos para comenzar de verdad mi clase dije:

- Una poción, esta palabra se deriva del latín potio, que significa: bebida, poción o veneno, se le considera una vida o muerte embotella, podemos embazar nuestra felicidad, pero también podemos predestinar el día de muerte de alguien. Obviamente, estudiantes no comenzaremos con ninguna poción de este nivel por su peligrosidad de preparación, pero seguramente, dentro de uno o dos años ya podremos comenzar a practicar con esas recetas. Primero que nada, en esta clase quiero comentarles que las pociones actuales están relacionadas con la antigua alquimia, y en estos momentos todavía guardan cierta relación. Pero esto será otro tema a discutir en clase. Hoy, estudiaremos una sencilla poción, referencia de dos profesores amigos, ellos son Estevan Cardona Haughton y Diego Weasley, si tienen quejas désenlas a ellos, ahora cambiando de tema. Esta poción fue inventada por Sacharissa Tugwood, entre 1890 y 1900, entre otras muchas de sus pociones, es una poción que nos sirve a chicas como a chicos, y más en su edad, que están pasando, que es el comienzo de su adolescencia, siempre nos viene bien tener un poco a la mano.

Tomé mi varita y escribí en la pizzara el nombre de la poción: Cura de Forúnculus

Me viré hacia los estudiantes y sin más dije:

- Comiencen a tomar notas de nuevo, no quiero que después me digan que no entendieron. Soy buena persona, pero no permitiré desaciertos en mi clase, aquellos que quieran hacerse los graciosos y divertidos, pueden salir ahora mismo de mi clase, sin protestar le quitaré sus puntos, recuerden que pociones es una asignatura básica, y todos los que salgan de esta aula desaprovarán este curso. Bien, abran sus libros en el tema 1, allí verán los ingredientes de esta poción, como verán son:

1. Ortiga seca
2. Colmillos de serpiente aplastados
3. Pedazos de cuerno
4. Púas de erizo
Me detuve a escribir yo misma dichos ingredientes, para mirar el rostro de todos y decirles:

- En el libro explica cómo hacerlo, pero quiero que práctiquemos en clase, así que saquen sus calderos, pueden tomar morteros de mi estante, y cuchillos, ya sé que no se mandan a comprar en primer año, pero necesito que aprendan a cortar los ingredientes, no soy eterna, por lo menos por ahora, cuando me convierta en vampira les aviso que los torturaré hasta que mueran. Continuando, ponemos a calentar el caldero, tenemos que dejar que caliente hasta que llegue a 90 grados más o menos. Ahora, piquemos en pedacitos chiquitos la ortiga y echénla al agua, eso hará que la ortiga hierva junto con el agua del caldero. Ahora, aplastemos con el mortero los dientes de serpiente, para que quede casi como polvo, y echénlo en el agua. Deben revolver muchas veces para que se junten dichos ingredientes, deben echar ya picados pequeñamente los pedazos de cuerno. Déjen que hierva el agua con sus ingredientes, menos las púas de erizo. Y, cuando hierva echen las púas de erizo, y saquen el caldero del fuego.

Caminaba mirando que todos estuvieran haciendo dicha poción correctamente, y parecía que lo llevaban bastante bien para ser su primera poción. Nadie todavía había dado señales de pelearse entre sí, pero, obviamente tenía que estar al tanto. Muchos comenzaron a sacar sus calderos con su poción realizada, me quedaba como unos 20 minutos de clase así que, desde mi caminata por al lado de ellos, dije:

- Ahora, colarán la poción, es para que no quede ningún pedacito de los ingredientes que se pueda sentir una vez que se tome dicha poción. Se hace así con todas las pociones, no importa si es para tomar o para huntar en la piel, solo importa una cosa, que no queden reciduos de los ingredientes. Después de colarla, deben ponerla dentro del frasco que tienen al lado, y estará lista.

Los estudiantes colaron la poción y la pusieron dentro de su frasco correspondientemente, me quedaban 10 minutos de clase, así que me paré delante de todos, y mientras escribía cosas en el pizzarón dije:

- Dejen sus pociones en aquella cesta con sus nombres escritos, los cuatro nombres de dicho equipo. Y como ya se nos está acabando el tiempo, pueden copiar su tarea, que acabo de terminar de escribir en el pizzarón, cualquier duda o consulta pueden venir a mi despacho a preguntarme, estoy disponible para todos. Ahora, si ya copiaron su tarea pueden irse, recuerden que debe estar lista para el jueves 23 de diciembre de 2010, sin excusas. Ya, eso ha sido todo, los espero aquí con tareas en manos en la próxima clase.